Opinión
Ericsson, tú antes molabas
Muchos de nosotros hemos conocido otro Ericsson. Una empresa donde ilusionaba trabajar y por la que sentías que merecía la pena esforzarse. Una empresa que cuidaba al empleado y a la que confiabas gustoso tu futuro laboral.
Las cosas han cambiado, y mucho. Un día nos la cuelan con el bono, otro se niegan a subir 2€ en tickets restaurante, se suceden los años con nulas o mínimas subidas salariales… siempre intentando recortar beneficios sociales. Y qué decir de los tan temidos EREs.
Hace tiempo las salidas en Ericsson eran anecdóticas y debidas a oportunidades que pocos dejarían pasar. Hoy las salidas son la norma, y muchos continúan en la Empresa esperando sólo el mejor momento para abandonarla.
Éste es el Ericcsson que termina 2018: una empresa con la plantilla quemada. Es curioso que la Dirección utilizase el término attrition para definir las fugas sufridas, un término muy usado en el ámbito militar para referirse a unidades debilitadas por la presión, las bajas y la falta de moral. Los trabajadores están hartos, y muchos ni están contentos en Ericsson ni querrían estar en Ericsson.
Está en manos de la Empresa cambiar la situación, pero no nos engañemos. Lo que vemos es más de lo mismo: mucho interés en reducir costes y pocas intenciones en mejorar salarios y beneficios sociales.
Unidos en la lucha
Durante el proceso del ERE 2017 hemos asistido a diferentes posicionamientos por parte de las Secciones Sindicales. Cada una, a su modo, buscando siempre la defensa de los intereses de los empleados.
La UNIDAD SINDICAL no significa que no se puedan tener posiciones diferentes, sino mantenerse fieles a la lucha por los derechos de los trabajadores desde la pluralidad de opiniones y opciones diferentes.
En CGT entendemos que criticar, menospreciar y ocultar las acciones del resto de Secciones Sindicales a través de comunicados incendiarios, en lugar de dialogar y buscar entre todos la mejor alternativa para proceder, es perder tiempo y energía en guerras vacías de contenido, con miras a conseguir réditos electorales, que a la larga sólo benefician a la Empresa. En CGT creemos en el diálogo para construir a partir de nuestros puntos comunes.
Nuestra intención es continuar luchando por el bien de toda la plantilla. Animamos al resto de fuerzas sindicales a que apoyen el rechazo total a la política de despidos continuos de la Empresa, la opacidad en su ejecución, la falta de interés negociador y el enfrentamiento continuo con la Representación Legal de los Trabajadores.